Ansiedad, miedos y TOC

Ansiedad, miedos y TOC

Ene 17, 2023 0 Por Omar El Bachiri

Es una asociación casi matemática, primero se sufre de ansiedad, un miedo irreal pero bastante discapacitante. Posteriormente, si no se trata puede convertirse en una fobia específica a esa situación o lugar y en escasos meses pueden instaurarse el TOC de limpieza y/o el de comprobación. El miedo siempre está presente y solo se apacigua bajo ciertos rituales conductuales, como por ejemplo, frotarse las manos un número determinado de veces, limpiar la casa igualmente un cierto de número diarios, comprobar que la puerta esté cerrada un sinfín de veces e incluso, cerrar y abrir la puerta del coche las veces que haga falta con el único propósito de comprobar que cierra bien. Así mismo y para que se entienda mejor cómo se puede adquirir el TOC de comprobación, expondré algunas situaciones comunes en el hogar.

Digamos que salimos a trabajar por la mañana y no regresamos hasta la noche y cuando entramos al comedor nos percatamos que hemos dejado la luz encendida. Claro, si esto lo aceptamos como un descuido e interpretamos que no es grave, de ahí no pasará. Sin embargo, si nos alarmamos e interpretamos que somos unos descuidados y que si lo hacemos otra vez, la factura de la luz se disparará o que una bombilla pueda explotar e incendiar la vivienda, seguramente, cada vez que salgamos de casa, verificaremos que la hemos apagado. Incluso, habrá veces que volveremos a entrar minutos después de haber salido para estar seguros de haberla apagado, es más, recorreremos todo el apartamento para comprobar que no ha quedado ninguna encendida.

Paralelamente, si no volviéramos a casa, estaríamos pensando en todo momento sobre si hemos apagado la luz o no e indudablemente, acabaríamos volviendo más tarde o enviando a alguien para comprobarlo. Otro ejemplo es cuando cerramos la puerta y le damos un pequeño empujón para comprobar que esté cerrada, pues hay quien le da un cierto número de veces determinado y si no lo hace no se queda tranquilo, piensa que no está cerrada, aun sabiendo que lo ha hecho a conciencia.

Por: Omar el Bachiri

Psicólogo clínico y escritor